¿Es necesario este blog náutico?

Posiblemente no. Ya existen muchos y, algunos, muy buenos. Pero cada día, como periodista, Director de la revista Navegar y del portal Navegar.es, me vienen a la cabeza comentarios a hacer sobre infinidad de temas, a veces, muy dispares, polémicos y banales... ¡o no tan banales!
He decidido no callármelos, aunque me vaya de orzada. Gracias.

lunes, 15 de febrero de 2010

¿Complejo de inferioridad europeo?

Sobre el socorrido “vuelve a casa” de la America’s Cup

Me está, hasta cierto punto, sorprendiendo el hecho de ver que en la mayoría de los medios de comunicación impresos y también en la red se refieren de esta manera a la implacable victoria de los norteamericanos sobre los suizos en la corta batalla disputada para ganar la Copa de las Cien Guineas de la 33ª America´s Cup en Valencia.


¿Qué es eso de que la "copa vuelve a casa"? ¿Es que la competición, mejor dicho, la bonita jarra pertenece a los Estados Unidos? Yo no diría eso.

La "Copa del América" (America's Cup) se llama así porque se reconoce la formidable victoria en ese primer desafío al barco "América" que lo ganó, precisamente en el Viejo Continente frente a la Isla de Wight contra un barco británico. Y punto. Otra cosa es que los americanos, los grandes dominadores tecnológicos del mundo en estos últimos 150 años, hayan podido retenerla justamente en su país. Eso nunca debe dar pie a pensar que les pertenezca. Faltaría más, por mucho que el Deed of Gift lo interprete finalmente un Tribunal de Nueva York.

También me sorprende que sean los propios periodistas (españoles) que hablen en estos términos ya que la nota de prensa oficial de la 33ª America’s Cup abre con un ponderado titular que reza que el “BMW Oracle Racing recupera la America’s Cup para Estados Unidos” que, sin duda, tiene otro sentido al de “vuelve a casa”. Porque recuperar significa “volver a tomar o adquirir lo que antes se tenía”… y añado yo sin que esto suponga ser el propietario. Lo cierto es que durante 15 años los Estados Unidos no han tenido la bonita jarra de plata en su poder ya que en ese tiempo ha estado depositada en Nueva Zelanda y en Suiza regalándonos en este corto periodo algo más de color deportivo frente a la hegemonía norteamericana.


Podría entender que "el vuelve a casa" lo escribiera la prensa americana por los lazos emotivos que representa haber retenido la jarra durante 150 años. Pero que sea gente de aquí quien lo diga... ¡me parece insólito! Y pensando mal podríamos decir que son tendenciosos o que, al menos, se alegran de que "vuelva casa"... ¡aunque no sea la suya!


Para que no se les acuse de ser deportivamente pro-norteamericanos me pregunto si también se referirán de la misma forma en caso de que los suizos o neozelandeses ganen la próxima edición de la America´s Cup… Si no, para mí, una de dos: quedará explícitamente claro un complejo de inferioridad importante respecto a los americanos o unas claras simpatías con ellos.

Quede claro también una cosa: desde aquí, como europeo, mi enhorabuena.

jueves, 11 de febrero de 2010

¿La prensa? Ah sí, los de la prensa...


El lunes 8 de febrero media redacción nos fuimos a Valencia para cubrir el supuesto primer día de competición. Y como ya se preveía lo que finalmente sucedió, es decir, que el barlovento-sotavento de 20 millas se aplazó por falta de viento, no nos quedó más remedio que trabajar en el centro de prensa. Allí hicimos tiempo analizando la situación con los colegas, colgando la última hora y las fotos en Navegar.es y retratar el buen ambiente que se respiraba en el bonito edificio Veles e Vent. Un ambiente divertido lleno de forofos del Alinghi y alguno suelto, ¡incauto! del BMW Oracle.
Desde el aplazamiento dictado por el Comité de Regatas, comunicado sobre las 13:50 h, hasta las 16:30 h aproximadamente, es lo que tardó en entrar por el canal el imponente Alinghi lloviendo incesantemente todo ese tiempo.
Allí me animé a ir a la “zona mixta” que es donde se pueden obtener unas primeras declaraciones con la tripulación y saber de primera mano que es lo que ha sucedido.
¿Y dónde estaba instalada la zona mixta?
Dónde iba a ser, en el exterior, bajo la lluvia, ¡claro! Tras más de 3 horas de espera, por supuesto, no había habido tiempo de preparar un “set” bajo cubierto donde acoger a los periodistas. La mayoría sufridos cámaras con sus presentadores, reporteros radiofónicos, fotógrafos, o personas como yo, responsable de una revista náutica. Imaginaros metidos en esa maraña de cables, trípodes y mala leche por coger el mejor ángulo posible de Jack Katzfey, meteorólogo del equipo, luego del consagradísimo Vrolijk, el jefe del equipo de diseño del catamarán, y más tarde el propio Ernesto Bertarelli, el magnate artífice del imponente catamarán y, para muchos, del enorme embrollo durante estos dos últimos años de la competición más antigua del mundo. ¡Kafkiano!
¿Era realmente necesario hacer el trabajo mojados como pollos?
Tras ver el percal, sólo me quedó el triste consuelo de constatar que esto no únicamente pasa en España al oir como un cámara británico despotricaba ironicamente a diestro y siniestro contra el equipo:
"It couldn’t be worst, it’s only the press out here"